El sótano del terror

Hoy me he despertado gritando y angustiado, las lágrimas empapaban mi almohada y ya con los ojos abiertos, seguían las imágenes torturando mi cerebro. Es origen de un caso que lleve entre el año 94-95...

En Ocaña habían desaparecido en tres meses unos niños todos miembros de una familia numerosa. Me encargaron el caso desde la segunda desaparición y me trasladé a la oficina local para seguir este caso de cerca...Los padres no tenían ni idea de donde estaban sus hijos, ni nadie daba alguna pista cuando con el tiempo desaparecieron todos los niños de la familia sin que nadie supiera nada ni hubiera una sola pista de donde podían estar, todos incluso yo me puse en lo peor...

Seguí día a día a los padres de estos niños sin mucha fe en que pudiera encontrar alguna pista, pregunté en todas las tiendas de comestibles y esta pareja compraba solo lo justo para sus necesidades diarias, yo pensaba en la posibilidad de que los tuviera escondido o en manos de alguna familia conocidos de ellos pero pronto lo descarté después de estudiar a todas sus amistades y comprobar sus propiedades. 

El caso parecía estar en punto muerto cuando un perro de la familia de un residente del pueblo, apareció un día con parte de un pie que por su tamaño parecía el de un niño, lo mandé al departamento forense donde definieron el adn que se comprobaba tenia semejanzas con el de los padres de los niños desaparecidos...La investigación se centro desde ese momento en los padres...

Puse una vigilancia férrea sobre los dos y a la tercera noche seguimos al matrimonio hasta un caserón en medio del campo entre una vegetación muy tupida que mantenía oculta una casa de piedra. Para entrar necesitábamos una orden de registro, pero a priori que miramos por todas las ventanas, no se veía nada en el interior. Al amanecer mi compañero se fue a ver al fiscal y yo seguí vigilando en los alrededores de la casa.

El matrimonio salio de la casa como a las ocho de la mañana y los deje marchar por no tener nada contra ellos y tampoco una orden para entrar en esa casa que no sabíamos de quien era. Sobre las once de la mañana volvió mi compañero con una orden firmada para que pudiéramos inspeccionar la casa. Estaba totalmente vacía y cuando nos disponíamos a marcharnos algo en una esquina en el suelo llamó mi atención, no parecía bien fijadas al suelo lo que me hacía pensar que fueran removible, fui al coche a por una barra de hierro y levanté todas las tablas en una superficie de un metro cuadrado. 

A mi vista apareció una pequeña escalera metálica que descendía en vertical como las que se ponen como pate en los pozos de registro. Al bajar el cuadro que se apareció ante mi era realmente macabro, estaban en ese sótano varios niños de diferentes edades, una joven semidesnuda estaba atada a unas cuerdas en el techo mientras otro joven con un cuchillo en la mano le cortaba lonchas de carne del vientre.

Los demás niños ni me miraron, parecían sonambulos o que esa barbaridad no iba con ellos. En un rincón se veía una pila de trozos de cuerpos humanos a medio devorar y el olor de la estancia era nauseabundo, me quedé horrorizado y vomité sin saber si era por el olor o por la vista de esos niños tan salvajes...

Fui al coche a llamar por teléfono y pedí varias ambulancias y el equipo científico a la vez que pedía una orden de detención contra los padres...Mientras esperábamos pude hablar con uno de los niños que parecía estar algo centrado y me explico que no le llevaban comida y por eso se comian a algunos niños que les traían sus padres y que cuando venían dos veces en semana tenían sexo con todos ellos sin distinción tanto el padre como la madre...Lo miraba confundido al que me hablaba hasta que las lagrimas nublaron mis ojos y no pude seguir escuchando...